¿Cómo saber si es el Espíritu Santo? Esta es una pregunta que muchas personas se hacen. Algunos creen que el Espíritu Santo es una persona, mientras que otros creen que es una fuerza. De hecho, el Espíritu Santo es ambas cosas. Es una persona que habita en nosotros, y es también la fuerza de Dios que nos anima y nos guía.
El Espíritu Santo es una de las tres personas de la Santísima Trinidad. Es el Espíritu de Dios que habita en los creyentes y les da vida espiritual. Los seguidores de Jesús pueden saber que el Espíritu Santo está en ellos porque les da un nuevo nacimiento, les da poder para vivir una vida santa, y les da sabiduría y entendimiento para conocer a Dios.
¿Cómo podemos saber si tenemos el Espíritu Santo?
El Espíritu Santo es una de las tres personas de la Santísima Trinidad. Es el Espíritu de Dios que habita en los creyentes y los capacita para vivir de acuerdo a los propósitos de Dios. La Biblia dice que el Espíritu Santo es el garante de nuestra herencia futura (Efesios 1:14).
El Espíritu Santo es quien nos da vida espiritual (Juan 3:6). Por medio del Espíritu Santo, Dios nos da el don de la fe (Efesios 2:8) y nos da el poder para ser testigos de Cristo (Hechos 1:8).
El Espíritu Santo nos da sabiduría y entendimiento (1 Corintios 2:13). También nos da el don de profecía (Hechos 2:17-18), el don de lenguas (1 Corintios 12:10), y el don de interpretación de lenguas (1 Corintios 12:10).
El Espíritu Santo es quien nos guía y nos enseña (Juan 16:13). Nos da discernimiento para distinguir lo bueno de lo malo (Hechos 5:3).
Podemos saber si tenemos el Espíritu Santo si somos creyentes en Cristo. Si hemos aceptado a Cristo como nuestro Salvador, entonces el Espíritu Santo habita en nosotros (1 Corintios 3:16). Podemos saber si tenemos el Espíritu Santo si estamos viviendo de acuerdo a los propósitos de Dios. Si estamos buscando la voluntad de Dios y viviendo de acuerdo a Su Palabra, entonces podemos estar seguros de que tenemos el Espíritu Santo.
¿Cuáles son las diferentes manifestaciones del Espíritu Santo?
El Espíritu Santo es la tercera persona de la Santísima Trinidad y es conocido como el «Consolador». Desde el momento de la Creación, el Espíritu Santo ha estado obrando en el mundo a través de la gracia. La Biblia habla de diversas maneras en que el Espíritu Santo se manifiesta a los seres humanos. Algunas de estas manifestaciones son el bautismo, la sanidad, el don de lenguas, y la profecía.
El bautismo en el Espíritu Santo es una experiencia que se produce cuando una persona acepta a Jesucristo como su Salvador. Desde el momento en que el Espíritu Santo desciende sobre la persona, ésta queda sellada para la eternidad y es adoptada como hija de Dios. El Espíritu Santo habita en el creyente y lo capacita para llevar a cabo la misión que Dios le ha encomendado.
La sanidad es otra forma en que el Espíritu Santo se manifiesta a los seres humanos. A través de la oración y el laying on of hands (imposición de manos), los creyentes pueden ser sanados de enfermedades y dolencias físicas. En muchos casos, la sanidad es instantánea y es un testimonio poderoso del amor y el poder de Dios.
El don de lenguas es otra forma en que el Espíritu Santo se manifiesta a los seres humanos. Este don se produce cuando una persona es capaz de hablar en un idioma que no ha aprendido de manera natural. Este don se produce en momentos de extrema necesidad, como cuando una persona necesita comunicarse con otra que no habla su idioma.
La profecía es otra forma en que el Espíritu Santo se manifiesta a los seres humanos. Los profetas son personas que han sido llamadas por Dios para anunciar el mensaje que él les ha revelado. A través de la profecía, Dios habla a su pueblo y les da instrucciones sobre cómo deben vivir.
Después de leer este artículo, esperamos que tenga un mejor entendimiento de cómo funciona el Espíritu Santo y cómo puede saber si es Él quien está trabajando en su vida.
El Espíritu Santo es uno de los tres componentes de la Trinidad. Es el Espíritu de Dios que habita en los creyentes y les da vida espiritual. Los seguidores de Jesús pueden saber si el Espíritu Santo está en ellos si viven una vida de obediencia a Dios y si tienen el fruto del Espíritu, que es amor, gozo, paz, paciencia, bondad, fe, humildad y self-control.
